Nada falla porque sí: falla para recordarte que el control era una ilusión práctica.
La Ley de Murphy no es pesimismo; es realismo con humor.
Todo lo que puede salir mal, saldrá mal… cuando más te sirva aprenderlo.
“La entropía no se combate; se negocia.”
Aceptar el caos no es rendirse: es entender que la perfección no es un requisito para avanzar.